Un sistema PIM (Product Information Management system) sirve para almacenar y gestionar de forma centralizada y transversal la información relativa a los productos. Además, esta información puede distribuirse a través de diferentes canales, lo que significa que todos los empleados tienen siempre acceso a la versión actual de los datos y pueden consultarla y editarla simultáneamente.
La digitalización garantiza la digitalización de todos los procesos de la empresa. Un sistema PIM es, por tanto, la versión digital de un catálogo de productos que puede actualizarse y distribuirse continuamente.
Un sistema de gestión de la información sobre productos apoya el proceso de las cadenas de suministro de información relacionada con los productos. Dado que diferentes departamentos, como el de desarrollo, compras, marketing y ventas, tienen acceso a los datos actuales en todo momento, todo el proceso puede controlarse de forma centralizada. Además, también se puede acceder al sistema desde fuera de la empresa, lo que simplifica enormemente la cooperación con clientes o empleados externos.
La base central también se denomina "punto único de la verdad", ya que todos los datos relevantes para el producto están actualizados, son coherentes y además están completamente presentes y disponibles en un solo lugar en todo momento. Esto también facilita la implementación de versiones en diferentes idiomas. Gracias a esta posición central, la calidad de la información puede estar siempre garantizada, lo que simplifica enormemente todos los procesos internos y externos.
A través de diversas interfaces con el sistema PIM, como un sistema de gestión de recursos empresariales (ERP), un sistema de gestión de las relaciones con los clientes (CRM) u otros sistemas de clientes existentes (por ejemplo, de SAP), los datos se recogen y se enriquecen en el punto único de verdad. A su vez, el sistema PIM ofrece varios canales de salida, como el CMS, diversas interfaces o posibilidades de creación de catálogos, para reproducir diversos extractos de los registros de datos de los sistemas de forma orientada al grupo objetivo. Los sitios web o las plataformas de comercio electrónico también pueden ser atendidos de esta manera.
Los sistemas PIM garantizan que la información actual de los productos se transfiera a todos los canales con la mayor rapidez posible y que, además, sea coherente en cada uno de ellos. Así se evitan errores y se garantiza un proceso fluido al trabajar con los clientes.
La digitalización de las empresas debe comenzar necesariamente con la transferencia de datos a un sistema PIM.
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